A veces escribo para sentir que existo.

Mientras caminaba sentia como se doblaban mis piernas, las energias empezaban a irse de mi. Pero no me rendiria, jamas. Di otro paso mas y el cuerpo pudo mas, cai de bruces sobre el lodo sin fuerzas para levantarme de nuevo. Cerre los ojos intentando recuperar alguna, no podia este ser el final y menos terminar asi. Estiré los brazos y las piernas sobre el suelo sin importar toda la lluvia que caia sobre mi. No habia explicacion razonable de lo que estaba pasando de un dia para otro todo habia cambiado y se habia echo un desastre. Ojala pudiera volver atras a arreglar mis errores y de desaparecer los "hubiera". Pero la vida es eso, vivir el momento simplemente sin titubear ni un solo instante. Al voltearme boca abajo se podia notar como las heridas de la espalda se abrian mas y mas, y dejjban escurrir ese liquido rojizo por todo el piso mojado. La traicion era dolorosa, terriblemente mortal pero lo unico que me habia mantenido en pie siempre habia sido tu presencia, tus pala...

Un pequeño hombre entra a la tienda cabisbajo, trae puesta una gran gabardina y un pequeño sombrero que le cubre la mitad de la cara. Da vuelta en el segundo pasillo a la derecha y empieza a rebuscar entre los aparadores algo nervioso. Otro hombre, empleado de la tienda, se le acerca amablemente y le pregunta que busca. Este hombre retrocede dos pasos mirandolo con inseguridad y luego tose ligeramente. - Estoy buscando un nuevo corazon el mio no esta cooperando.- hace una mueca de disgusto y se lleva la mano al pecho. -Claro que si, si me acompaña por aqui lo haremos de inmediato. Ambos hombres se escabuyen a un pequeño espacio en la parte de atras. A simple vista se puede apreciar como un pequeño negocio de optica pero al entrar se podia oir un constante latir y ver extrañas figuras en las vitrinas que parecian moverse por si solas. El cliente se sento y el dueño del negocio no tardo en aparecer. Revisó rapidamente al hombre y asintio para si mientras se metia a una pequeña bodega al ...

El paraguas cayó en mil pedazos sobre aquel pobre basurero metálico. Memo estaba harto, todos los paraguas que conseguía se volvían monótonos y aburridos en esta vida tan gris. Pero la solución estaba tan cerca y tan simple. Se quedo mirando aquellas bolas de estambre que tanto disfrutaban su gato y su abuela. Tomo el metal que componía la sombrilla anterior y una aguja para tejer. Al hacer esto pudo visualizar fácilmente al estambre volando por entre los metales como movidos por manos de aire. Abstraído en un mundo de música y movimiento entro a la tienda. Observaba los estambres y en ellos veía colores hermosos. Escogió un rojo vibrante, un amarillo llamativo y revitalizante, y por ultimo escogió un verde; que le recordaba a la vida, la alegría, movimiento, frescura , libertad. Extasiado saco rápidamente tres monedas del bolsillo se las entrego al encargado y salió corriendo de la tienda. Sin darse cuenta sonreía sentía que haría lo mejor de su vida, que salvaría al mundo, se sentía ...